Mando a distancia. Arte en la TV
Sin embargo, la televisión como medio supremo de cultura de masas dirigida vive su ocaso y su público, ayer cautivo, se difumina entre los cientos de canales por satélite o cable, el DVD, los videojuegos y los teléfonos móviles 3G. Un momento de autonomía del ocio en la que los grandes proyectos de la televisión cultural, que marcaron la segunda mitad del siglo XX, no volverán a repetirse. Mando a distancia. Arte en la TV ofrece una selección de algunos de los momentos históricos en la historia de la relación del arte con la televisión.
Este medio poderoso, que sigue siendo para algunos sinónimo de incultura pasiva, es tradicionalmente poco consumido (o a escondidas) por las clases ilustradas. Sin embargo, un debate constante, fuera y dentro del medio, sobre la naturaleza y las necesidades de los distintos públicos, la finalidad de los programas sobre arte, la adecuación del lenguaje televisivo, la importancia de la técnica (audiovisual y artística), los grados de autoridad o subjetividad, de instrucción o entretenimiento, etc., ha producido una gran variedad de propuestas. Si el arte es un laboratorio de identidades sociales, también es uno donde las mismas instituciones emisoras han ido experimentando hacia una identidad diversa, ágil y reflexiva. Sin abandonar el espíritu periodístico, la televisión cultural más audaz ha revolucionado la comprensión del arte mientras que, reflejando y trascendiendo la plasticidad, deviene en verdadera colaboradora del arte contemporáneo. Desde una pluralidad de formatos que median entre el arte visual y un público notoriamente escéptico frente a la plástica actual, los caminos y los hitos van desde Monitor (1958-1965), programa pionero del que salieron cineastas como Ken Russell y cuya influencia perdura, hasta The Shock of the New, dirigido y presentado por Robert Hughes (Sídney, 1938) en 1980, monumento irrepetible en el que despliega su visión personal del “siglo XX a través de la lente de su arte”. A través de estos y otros ejemplos, la selección que conforma Mando a distancia, no aspira tanto trazar el perfil de esta rica y compleja historia, sino compartir algunas de sus joyas e indicar lo mejor de las tendencias futuras.