Cuadro
Manuel Millares
- Fecha:1957
- Técnica:Técnica mixta y óleo sobre arpillera
- Dimensiones:98 x 130 cm
- Categoría: Pintura
- Año de ingreso:2009
- Nº de registro:AD05410
Manuel Millares participó en diversos episodios de la renovación del panorama artístico español en la segunda mitad del siglo XX: impulsó en Canarias la creación del grupo LADAC (Los Arqueros del Arte Contemporáneo) y se integró posteriormente en Madrid en el grupo El Paso (1957-1960). En 1955 abandonó la serie denominada Pictografías, composiciones cuya temática enlaza con aspectos de la cultura autóctona canaria, introduciendo paulatinamente en su obra nuevos materiales: cartones, maderas, fragmentos de cerámica, tierras y arpilleras. El interés por las texturas, materias y grafismos era ya evidente desde el inicio de su trayectoria y determinó el desarrollo de un lenguaje simbólico que le identificaría en adelante. Hacia 1957 se impuso en su trabajo la utilización de la arpillera, cuyo poder constructivo se unió al expresivo de la mancha y al gesto-estructura obtenido por el relieve de la tela. Millares reiteró el uso de la tela desgarrada y pintada con rojos, negros y blancos, remarcada por chorreados, cruces y homúnculos, que configuran tanto una imagen tridimensional dramática como una reflexión sobre elementos contrarios: construcción y destrucción, cosido y desgarrado. Millares describía su pintura como el acto de «acribillar los espacios infinitos y torturarlos con la dinámica maraña de unas cuerdas». Su obra representa una contestación tanto a la tradición pictórica como a la modernidad, desde el rechazo del lienzo, la anulación de cualquier ilusión de tridimensionalidad y la insistencia en la presencia física de la obra en el espacio.