Blanca Muñoz. El universo transparente

24 marzo - 2 mayo, 2004 /
Edificio Sabatini, Espacio Uno y Jardín Sabatini

Aunque la obra de Blanca Muñoz (Madrid, 1963) ha cambiado mucho durante los últimos años del siglo XX, la idea de proyección astral todavía sigue vigente en sus estructuras metálicas. En esta exposición distribuida entre el Espacio Uno y el Jardín Sabatini del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, Muñoz presenta tres esculturas cuyos títulos hacen referencia a objetos astronómicos. Del mismo modo que muchos otros artistas del siglo XX, Muñoz se siente fascinada por la astrofísica y la organización de las formas en el espacio vacío. Tanto es así, que su interés por las teorías cosmológicas la llevó a formar parte de la Agrupación Astronómica de Madrid. Estas teorías influyen de manera decisiva en sus trabajos.

Cada una de las piezas presentes en esta exposición lleva el nombre de un objeto astronómico y se presenta como un paisaje de una región del Universo. La artista parte de la fijación de unos puntos de referencia y establece entre ellos las conexiones, soldando varillas de acero para constituir el armazón. Después, agrega las variantes como voces de una composición polifónica que puede hacerse infinitamente compleja. La obra de Blanca Muñoz ha sido merecedora de numerosos premios, entre ellos el Premio Nacional de Grabado en 1999.

Además de la astrofísica, la escultura de Muñoz es heredera del constructivismo científico inspirado en modelos físico-matemáticos, así como del constructivismo lírico de las constelaciones. Sus primeras esculturas astronómicas de 1993 llevan títulos referidos a la orientación hacia la estrella polar u otros puntos del cielo. Así pues, el título de su exposición en el Museo Reina Sofía: El universo transparente, alude al microcosmos de la escultura, dado que la transparencia ha sido uno de los rasgos que han definido el modelo escultórico en la modernidad.

La historia de la escultura transparente arranca con el Cubismo y desde entonces este medio ha tratado de abrazar el aire con un entramado de líneas y planos. Tal es el caso de Julio González, además de otras expresiones surgidas en el seno del Futurismo y especialmente, en el Constructivismo. Serán los constructivistas quienes -partiendo de la disección cubista del objeto y de la utopía futurista de los ojos con rayos X- forjarán el ideal de la transparencia en la escultura, liberándola de la opacidad y la gravedad. Para ellos la transparencia era una metáfora de la inteligibilidad total, del dominio absoluto de la materia y el espacio, alcanzable gracias a la ciencia y la tecnología moderna.

Datos de la exposición

Organización: 
Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía
Comisariado: 
María José Salazar
Artistas: